HOJA DE SALA
Factura del sujeto excluido
¿Imaginan pagar un impuesto por ser mujer? El Art. 119 del actual Código Tributario establece la naturaleza de la denominada «Factura de Sujeto Excluido», relacionada con la declaración del IVA y totalmente alejada de la temática de la presente exposición colectiva en Galería Zunino, pero ¿y si ese tributo existiese realmente?
En esta muestra, bajo el título El sujeto excluido, la mujer se convierte en germen y núcleo conceptual, analizando la exclusión como rasgo identitario, como lenguaje, como estética. Así, los artistas participantes aportan su visión sobre la figura femenina vigente y pasada en un ejercicio de reflexión no solo artística, sino también social, que trata de concienciar sobre la responsabilidad colectiva que supone la igualdad.
Desde este prisma, las obras de Ángel Pantoja muestran las armas de una mujer fuerte y combativa, pertrechadas a partir de elementos asociados tradicionalmente con el ámbito de lo femíneo con los que se viste para luchar. Aunando delicadeza y fortaleza, Beauvoir sería la marca líder de ventas en una realidad no muy lejana.
Esa fuerza aparece también en las escenas creadas por María Cañas y Pedro Camons siendo en este caso doble: por una parte, surge de la superficie, de lo inmediatamente visible, mientras que, por otra, emerge del leitmotiv de la serie, basado en la deconstrucción crítica de la memoria colectiva, de la propia historia y de los tópicos culturales asociados al género.
La formación de la identidad a través de la herencia, la transmisión del patrimonio cultural y el uso de la imagen como anclaje para la tradición se encuentran igualmente presentes en la pieza audiovisual de Amalia Ortega, quien ofrece una mirada personal en torno a los mecanismos y estrategias que apuntalan los prejuicios y los estereotipos.
Tal y como sostiene Esther Morcillo, «la reivindicación es inevitable» y así lo confirman sus obras, fruto del proyecto EVA_LAB, en las que descompone la esencia de la primera mujer para recomponerla de nuevo en un juego simbólico con la técnica empleada, el collage, presente como hilo conductor en toda la muestra.
La cultura popular y la alta cultura se combinan en la producción de Bea Sánchez con un mensaje irónico y aparentemente humorístico sobre la mujer-madre-artista. Sus vivencias son ofrecidas de forma altruista en una pieza que pretende instruir en valores desde la belleza.
Desde un ambiente teatral, Fernando Bayona compone un escenario en el que la mujer es representada sin límites reales ni definidos. La mirada viaja desde los sujetos hacia los objetos y su contexto para volver a las figuras en un diálogo traslaticio a través de máscaras, espejos y escaleras.
En esta propuesta expositiva, tan necesaria como conveniente, el arte se convierte en mecanismo de inclusión y reivindicación, de integración dentro de un engranaje en el que no sobra nadie y nada resta. Y, por favor, no olviden que la Factura de Sujeto Excluido la pagamos todos.
Jennifer Rodríguez-López